Chuchi Hidalgo y Vicente Celeiro reviven el partido del Dépor contra el Arenteiro de 1988: «Marqué en Marathón tras una pared con Agulló»

Antón Lestón Lago
Antón Lestón REDACCIÓN / LA VOZ

TORRE DE MARATHÓN

Vicente Celeiro durante un partido de 1988.
Vicente Celeiro durante un partido de 1988. XOSE CASTRO

«No me acuerdo del partido, pero sí de aquella Copa en la que llegamos hasta las semifinales. Nos hacía ilusión jugar contra los equipos de Primera y fuimos capaces de eliminar a una gran Real Sociedad», recuerda Celeiro

27 abr 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Para toda una generación que creció con el Dépor de los ochenta, la Copa del Rey 1988-1989 fue muy especial. Aquella en la que los blanquiazules alcanzaron las semifinales pese a ser un equipo de Segunda División y en la que cayeron de forma polémica contra el Real Valladolid, luego de eliminar a la Real Sociedad y al Mallorca. No obstante, la primera ronda de aquel torneo propició un cruce más cercano para el equipo que ya entrenaba Arsenio Iglesias. Fue contra el Arenteiro, equipo que por entonces militaba en Segunda B. El choque de ida se disputó en Espiñedo el 30 de agosto. «Nos lo pusieron muy complicado, iban ganando 2-0 y casi al final marqué de cabeza tras un centro al segundo palo de Cayetano», recuerda Jesús Chuchi Hidalgo.

En Riazor el asunto fue muy diferente y el Dépor hizo valer su condición de equipo superior: «Lo resolvimos muy bien, porque teníamos mucha confianza y sabíamos que éramos mejores. Recuerdo que tenían un gran entrenador, como Fernando Castro Santos, pero les pasamos por encima», dice un Chuchi de memoria prodigiosa y que marcó el primero en el minuto 6. «Fue en la portería de Maratón, después de una buena pared con Jaime Agulló y se la coloqué bien al portero», rememora. El segundo fue de un Vicente Celeiro que no se acuerda demasiado: «Del partido en sí no, aunque creo que no había mucha gente en el campo, pero sí de aquella Copa, que fue muy bonita, porque nos hacía ilusión jugar contra los equipos de Primera y fuimos capaces de eliminar a una gran Real Sociedad», indica. El tercero lo hizo Ramón Calvo y Gonzalo Mella, el padre de David, cerró la goleada (4-0).

«Pero aquello no era equiparable a lo de mañana», advierte Chuchi, que terminó su carrera precisamente en el conjunto de O Carballiño, «era un partido de septiembre contra un rival de menor categoría», continúa. Por segunda vez en la historia, el Arenteiro visitará Riazor de manera oficial.